CIUDAD DEL VATICANO, 22 de abril de 2016 (VIS).- Más de 60.000 adolescentes de todo  el mundo acudirán a Roma del 23 al
 25 de abril para participar en el Jubileo de los chicos y las chicas, 
cuyo lema es “Crecer misericordiosos como el Padre”. Serán tres días de 
oración, confesión y peregrinación a la Puerta Santa pero también de 
fiesta y compartición en el Año de la Misericordia, según informa el 
Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización que 
facilita también el link al que se puede acceder para prepararse al 
evento http://www.gmg2016.it/giubileo-dei-ragazzi/sussidio/ .
El sábado 23, la jornada se abrirá con la peregrinación a la Puerta 
Santa que comenzará con la procesión de los jóvenes desde Castel 
Sant'Angelo a lo largo de la Vía della Conciliazione para llegar a la 
Plaza de San Pedro. La columnata de Bernini se transformará entonces en 
el “abrazo” del Padre que los adolescentes podrán experimentar gracias a
 los más de 150 sacerdotes que, en diversas lenguas, se alternarán 
ininterrumpidamente desde las 9.30 a las 17.30 para administrar el 
Sacramento de la Reconciliación.
Por la tarde, al final del recorrido jubilar dentro de la basílica 
que concluirá con la profesión de fe sobre la tumba de Pedro, los chicos
 y chicas se desplazarán al Estadio Olímpico donde se ha organizado una 
fiesta a la enseña de la música y los testimonios que se abrirá a las 
20.30 y en la que participan personalidades del mundo del cine, del 
deporte y de la astronomía.
El domingo 24 de abril, la santa misa presidida por el Papa 
FRANCISCO en la Plaza de San Pedro, representará el fulcro de este gran 
evento jubilar. La jornada proseguirá con la visita a las tiendas de la 
Misericordia montadas con motivo de esta peregrinación en siete plazas 
del centro histórico de Roma (San Silvestre, Plaza de España, San 
Salvador in Lauro, Santa María en Trastevere, Santa María en 
Vallicella-Iglesia Nueva, Plaza Pía en Castel Sant'Angelo y la zona de 
la terraza del Pincio) en las que, desde el sábado al lunes, se narrarán
 a los peregrinos y a los ciudadanos de Roma testimonios de obras de 
misericordia espiritual y corporal.