Sucesivamente se examinaron los resultados de la consulta efectuada
en los dicasterios de la Curia Romana, las conferencias episcopales, las
Iglesias orientales y la Unión de los Superiores Generales para
individuar el tema de la próxima Asamblea General Ordinaria. Tras un
amplio debate se individuaron algunas propuestas que serán sometidas a
la atención del Santo Padre.
A continución los miembros del consejo analizaron la revisión del Ordo Synodi Episcoporum, último punto del orden del día. Al respecto, el obispo Fabio Fabene, subsecretario del Sínodo de los Obispos, informó sobre el seminario de estudios organizado expresamente por la Secretaría General, tras el discurso pronunciado por el Papa Francisco el 17 de octubre de 2015. Los miembros del consejo profundizaron en el tema dividiéndose en circuli minori y presentaron en la sesión plenaria una relación sobre el trabajo llevado a cabo.
De los informes de los grupos se desprende, entre otras cosas, que la valoración de la sinodalidad y de la colegialidad deben conjugarse siempre con el ejercicio del ministerio del Obispo de Roma, para unir fructuosamente primado, colegialidad y sinodalidad.
Al final de los trabajos el Santo Padre ha dado las gracias a los miembros del consejo por sus aportaciones y por el espíritu de comunión fraternal que ha presidido la reunión.
A continución los miembros del consejo analizaron la revisión del Ordo Synodi Episcoporum, último punto del orden del día. Al respecto, el obispo Fabio Fabene, subsecretario del Sínodo de los Obispos, informó sobre el seminario de estudios organizado expresamente por la Secretaría General, tras el discurso pronunciado por el Papa Francisco el 17 de octubre de 2015. Los miembros del consejo profundizaron en el tema dividiéndose en circuli minori y presentaron en la sesión plenaria una relación sobre el trabajo llevado a cabo.
De los informes de los grupos se desprende, entre otras cosas, que la valoración de la sinodalidad y de la colegialidad deben conjugarse siempre con el ejercicio del ministerio del Obispo de Roma, para unir fructuosamente primado, colegialidad y sinodalidad.
Al final de los trabajos el Santo Padre ha dado las gracias a los miembros del consejo por sus aportaciones y por el espíritu de comunión fraternal que ha presidido la reunión.