Yangon, MYANMAR (Agencia Fides, 23/08/2016) - Entre los temas que se tratarán después de
medio siglo de gobierno en régimen militar en Myanmar se encuentra una
larga serie de conflictos entre el ejército y los grupos étnicos
minoritarios que viven en el país. “Es muy importante que el nuevo
gobierno promueva una paz duradera con estos grupos”, dice Cardenal
Charles Maung Bo, Arzobispo de Yangon, en un comunicado enviado a la
Agencia Fides. “El gobierno está tratando de resolver la situación, pero
la construcción de la paz tomará tiempo”. La paz auténtica “se
construye incluyendo a las partes principales involucradas y no
dejándolas fuera de la próxima conferencia de paz de Myanmar”, ha
continuado, instando a todos a “reiterar su disposición a trabajar por
la reconciliación”.
“Los líderes, los grupos armados, los partidos políticos: todos tienen
la obligación moral de seguir un camino de paz”, ha señalado el cardenal
Bo, instando a que se involucre también a las organizaciones que no han
firmado la tregua en el evento tan esperado de la “Conferencia de
Panglong del siglo XXI” que se realizará el 31 de agosto. La Conferencia
será un momento en que el gobierno de Birmania, actualmente dirigido
por la Liga para la Democracia (Nld), tiene la intención de poner en el
centro de la agenda, las conversaciones de paz con los grupos étnicos
que desde hace años luchan por la autonomía.
Se trata de un paso histórico, según el Cardenal, porque la nueva
Conferencia es la primera después de la del 12 de febrero de 1947 que
consagró el nacimiento de Birmania y que fue firmado por cuatro grupos
étnicos: Bamar, Chin, Kachin y Shan. Según los observadores, la
perspectiva para la reconciliación nacional podría ser la de diseñar un
estado siguiendo el modelo federalista.