Manila, FILIPINAS (Agencia Fides, 05/08/2016) - “No mataras”: así se titula la campaña lanzada
por la Iglesia Católica en Filipinas, para promover el respeto a la vida
humana y deplorar el largo rastro de ejecuciones extrajudiciales que
están sucediendo en el país. De acuerdo con los datos de las
organizaciones no gubernamentales son más de 400 las víctimas en los
últimos meses. Muchos creen que el nuevo presidente Rodrigo Duterte
directa o indirectamente es responsables, dado su énfasis en la
seguridad y el “respeto a la ley y al orden” que empuja a la policía - y
a los equipos de los “vigilantes” - a eliminar delincuentes comunes,
especialmente vinculados a la venta de drogas.
La campaña, lanzada en las últimas semanas en Manila, tiene como
objetivo reunir a las familias de las víctimas de ejecuciones
extrajudiciales. El p. Atilano Fajardo, uno de los promotores, ha
invitado a las familias a participar en una misa, rezar y unirse a una
toma de conciencia por el respeto de la dignidad humana.
La Conferencia Episcopal de Filipinas en las últimas semanas ha hecho un
llamamiento
oficial, firmado por el presidente, el arzobispo Sócrates
Villegas, dirigido especialmente a la policía, en el que les insta a
“conservar su humanidad”, en el trato a los delincuentes y traficantes
de drogas.
“Se puede disparar a matar sólo con el único motivo de legítima defensa
propia o de otras personas”, dice, y “matar a un sospechoso no es
moralmente justificable”, incluso si ha tratado de escapar, continúa el
texto.
El mensaje también deplora la práctica de “obtener una recompensa en
dinero por matar a otra persona” y reitera que “es deber moral de todos
los cristianos de denunciar a los 'vigilantes' cuando se ve a bandas de
vigilantes matando con facilidad, sin respeto al estado de derecho, y
con total impunidad. El texto pide “justicia y legalidad” en el respeto
de la dignidad de toda persona humana.