CIUDAD DEL VATICANO (http://es.radiovaticana.va/ - Agosto 15 de 2016).- La tarde del 12 agosto, en el marco de los “Viernes de la Misericordia”, el Santo Padre FRANCISCO dejó el Vaticano para dirigirse a una filial romana de la “Comunidad Papa Juan XXIII” fundada por don Oreste Benzi, para encontrar a 20 mujeres liberadas de la esclavitud de las mafias de la prostitución. Seis de ellas provenientes de Rumanía, 4 de Albania, 7 de Nigeria, y las otras tres respectivamente de Túnez, Italia y Ucrania. La edad media bordea los 30 años. Todas ellas han sufrido graves violencias físicas y ahora viven protegidas.
Esta nueva visita de FRANCISCO es
otra llamada de atención a la conciencia del mundo para combatir el
tráfico de seres humanos, que el Santo Padre ha definido varias veces
como “un delito contra la humanidad”. “Una llaga en el cuerpo de la
humanidad contemporánea, una llaga en la carne de Cristo”. El gesto de
hoy se suma a los “Viernes de la Misericordia” ya vividos por el Papa a
lo largo del Jubileo: en enero el Santo Padre visitó un
asilo de ancianos y una casa para enfermos en estado vegetativo en Tor
Spaccata; en febrero, una comunidad para tóxico dependientes en Castelgandolfo;
en marzo (el Jueves Santo) el Centro de acogida para prófugos (CARA) de
Castelnuovo di Porto; en abril fue a encontrar a los prófugos y
migrantes en la Isla de Lesbos; en mayo tocó el turno a
la comunidad del “Chicco”, en Ciampino, para personas con graves
problemas mentales; en junio el Papa visitó dos comunidades romanas para
sacerdotes ancianos.
El pasado viernes 29 de julio, durante su viaje a Polonia, el Obispo de Roma también cumplió su “Viernes de la Misericordia” con la oración silenciosa en Auschwitz-Birkenau, su visita a los niños enfermos en el hospital pediátrico de Cracovia y el Via Crucis con los jóvenes de la JMJ, en presencia de tantos chicos y chicas iraquíes, sirios y de otras zonas de guerra y conflicto.
(RC-RV)