Tokio, JAPÓN (Agencia Fides, 08/08/2016) - En respuesta al fuerte “llamamiento por la paz”
de Hiroshima que realizó san Juan Pablo II el 25 de febrero de 1981, la
Conferencia Episcopal de Japón ha designado a los días entre el 6 y el
15 de agosto como los “Diez Días por la paz”. Se han elegido estos días
porque recuerdan la explosión de la bomba atómica sobre Hiroshima y
Nagasaki, y la conmemoración del final de la Segunda Guerra Mundial.
Este año se cumple el 35 aniversario.
“La paz mundial se está haciendo añicos y está continuamente amenazada
por acontecimientos como la guerra de Siria, las actividades terroristas
de los fundamentalistas y otros muchos conflictos armados, que
pretenden el control de los recursos y sólo quieren mostrar su fuerza.
Muchas personas, incluidas mujeres y niños mueren o resultan heridas,
obligadas a huir de sus hogares, privadas de una vida normal e incuso de
la vida misma. Los ataques terroristas se llevan a cabo en las
principales ciudades de Europa, en Estados Unidos y en países
musulmanes. Muchos japoneses también han sido víctimas”, informa la nota
recibida por la Agencia Fides.
“Con la fuerza de la humanidad y la gracia de Dios, queremos lograr el
alto ideal de eliminar no sólo las armas nucleares, sino todo tipo de
armas y la violencia del mundo. En nuestro país, no podemos quedar
indiferentes ante los asesinatos que ocurren todos los días, o la
discriminación basada en la nacionalidad, la cultura o el género, la
violencia doméstica, los discursos de odio, el acoso sexual o de poder.
No hay paz, donde hay personas excluidas o dominadas, discriminadas o a
las que se les falta de respeto. Haciendo esfuerzos para completar la
plenitud y la felicidad del corazón y del cuerpo, el trabajo y la vida
privada, y las relaciones con Dios y con las personas, en particular,
tenemos que empezar a construir la paz dentro de nosotros. Todos podemos
hacerlo y todos tenemos que hacerlo. Este es el camino seguro para
alcanzar la paz en el mundo”, concluye el texto.