Baghdad, IRAQ (Agencia Fides, 29/08/2016) – La posible disposición política y
administrativa futura de Mosul y de la Llanura de Nínive, después de la
eventual liberación de esas zonas, que siguen bajo el control de los
yihadistas del estado islámico (Daesh), todavía es una cuestión
“incierta” y “no es prudente hablar de autodeterminación”, pensando al
momento del retorno de los desplazados. Así lo piensa el Patriarca
caldeo Louis Raphael I, que ha manifestado su opinión en un encuentro
celebrado este jueves, 25 de agosto, con el General estadounidense Terry
Wolff, enviado especial del Presidente Usa ante la coalición militar
internacional anti-Daesh dirigida por los Estados Unidos. Durante el
encuentro, al que también han asistido algunos líderes de la Embajada
Usa en Iraq, el primado de la Iglesia caldea ha recordado que Estados
Unidos tiene la “responsabilidad moral de ayudar a Iraq a salir de la
grave situación en la que se encuentra”.
El patriarca caldeo ha hablado así tras una serie de acciones y
declaraciones de los líderes y militantes de las fuerzas políticas
locales sobre el futuro político y administrativo de la zona, que aún
está bajo el control del Daesh. En los últimos días, los representantes
de los partidos políticos guiados por activistas cristianos, como el
parlamentario nacional Imad Youkhana, han solicitado que se reconozca la
autonomía garantizada por la constitución iraquí a la zona de Nínive,
permitiendo que las administraciones locales puedan llevar la gestión de
temas tales como el de la seguridad.
A finales de julio, el político sunita Atheel al Nujaifi, ex gobernador
de la provincia de Nínive y líder del partido político al Hadba, había
declarado que la provincia de Nínive, una vez liberada del control de
los yihadistas del Estado Islámico (Daesh), se transformaría en una
región autónoma, dividida en provincias - entre seis y ocho - dotadas de
un cierto grado de autonomía administrativa. Tales declaraciones se
dirigían también a los cristianos que vivían en los pueblos de la
Llanura de Nínive, y que huyeron en masa antes de la conquista de la
región por parte del Daesh. En esas declaraciones se planteaba una vez
más, el proyecto de una “provincia autónoma de mayoría cristiana”, que
se podría crear en la Llanura de Nínive para reconocer un papel a las
comunidades cristianas locales, en el funcionamiento de las
instituciones administrativas y en el ámbito de la protección y la
seguridad.
Pero las palabras de al Nujaifi también confirman que las “promesas”
dirigidas a los cristianos se están convirtiendo en propaganda para los
proyectos de gestión política de la zona, que se muestran en clara
competencia entre sí.
Anteriormente, el líder kurdo Masud Barzani,
presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí, en una reunión
con políticos cristianos, que se celebró en Erbil, había presagiado la
creación de una “provincia cristiana” en la llanura de Nínive y la
convocatoria de un referéndum para permitir que los habitantes de una
entidad administrativa autónoma similar pudiesen elegir su propio marco
político bajo el gobierno de un Kurdistán iraquí independiente, en lugar
de bajo el gobierno federal con sede en Bagdad.