En este itinerario espiritual siguiendo los pasos de San Francisco, el Papa ha
sido acogido y acompañado por el Obispo de Rieti, Monseñor Domenico Pompili.
La primera etapa
de la peregrinación, por la mañana, fue en el convento en Carsoli, de la época
de San Francisco. Tras llegar en coche, acompañado por algunos agentes de la
Gendarmería vaticana, el Pontífice se reunió con las Hermanas Reparadoras del
Divino Rostro de Nuestro Señor Jesucristo y celebró la misa. Sucesivamente, por
la tarde, FRANCISCO fue a rezar al Santuario de Borgo San Pietro, donde está el
cuerpo de santa Felipa Mareri, fundadora de ese monasterio por estímulo directo
de San Francisco. En este lugar el Papa se reunió con la comunidad de las
hermanas franciscanas, compartiendo con ellas una reflexión sobre la belleza y
la gran importancia de la misión de las mujeres consagradas en la Iglesia.
(FUENTE: http://L’Osservatore Romano).