Trabzon, TURQUÍA (Agencia Fides, 30/08/2016) - El joven turco de 26 años de edad, Oguzhan
Ayudin, condenado en 2006 a 18 años y 10 meses de prisión por el
asesinato del sacerdote italiano Don Andrea Santoro, ha sido puesto en
libertad hace unos días, más de 10 años antes de la espiración de la
pena de prisión dictaminada en su contra. Según la información reportada
por la prensa turca, Aydin es uno de las decenas de miles de
prisioneros liberados antes de tiempo para liberar las celdas necesarias
para la detención de las miles de personas arrestadas después del
fallido golpe de estado del pasado 15 de julio.
El asesinato del padre Andrea Santoro ocurrió el 5 de febrero de 2006,
mientras el sacerdote italiano estaba rezando en la iglesia de Trabzon
donde llevaba a cabo su labor pastoral. El asesino, antes de ejecutarlo
con dos tiros gritó “Allahu Akbar” (“Dios es grande”). Cuatro días
después Aydin, en ese momento menor de edad, fue detenido y él mismo
confesó ser el autor del asesinato, justificándolo con la
“perturbación”, que le habían provocado en el ánimo, las caricaturas de
Mahoma, publicadas meses antes en un periódico danés. Desde el
principio, muchos observadores expresaron sus dudas e inquietudes acerca
de las investigaciones que habían sido precipitadas “resolviendo el
caso” con la detención de un menor, al momento tenía quince años, que si
era declarado culpable, debido a su edad, habría sido condenado a una
pena más ligera que la prevista en eventos similares para adultos.