CIUDAD DEL VATICANO (http://press.vatican.va - 11 de diciembre de 2017).- La Santa Sede sigue con gran atención la evolución de la situación en el
Oriente Medio, especialmente la relacionada con Jerusalén, ciudad santa
para los cristianos, judíos y musulmanes de todo el mundo. El Santo
Padre FRANCISCO expresa su pesar por los enfrentamientos que en los últimos días
han causado víctimas y renueva su llamamiento a la sabiduría y a la
prudencia de todos mientras eleva fervientes oraciones para que los
responsables de las naciones, en este momento particularmente grave ,
se esfuercen por evitar una nueva espiral de violencia y respondan con
palabras y hechos, al anhelo de paz, justicia y seguridad de las
poblaciones de esa tierra atormentada.
Las preocupaciones sobre las perspectivas de paz en la región son
objeto estos días de diversas iniciativas, incluidas las reuniones
convocadas con urgencia por la Liga Árabe y la Organización de
Cooperación Islámica. La Santa Sede es sensible a estas preocupaciones
y, recordando las sentidas palabras del Papa Francisco, reitera su
conocida posición sobre el carácter singular de la Ciudad Santa y la
indispensabilidad del respeto por el status quo, de conformidad con las
resoluciones de la comunidad internacional y las reiteradas peticiones
de las jerarquías de las Iglesias y de las comunidades cristianas de
Tierra Santa. Al mismo tiempo, reitera su convicción de que sólo una
solución negociada entre israelíes y palestinos conducirá a una paz
estable y duradera y a garantizar la coexistencia pacífica de dos
Estados dentro de las fronteras internacionalmente reconocidas.