Cochabamba, BOLIVIA (Agencia Fides, 12/12/2017) -“La profunda espiritualidad indígena en su
relación armoniosa con toda la creación ve en el cuidado de la casa
común una responsabilidad para con las siguientes generaciones.El
vínculo de relación entre los pueblos indígenas y la Madre tierra se
traduce en un cuidado recíproco: el ser humano de la casa común y la
casa común del ser humano”: así lo explica en una conversación con al
Agencia Fides Tania Avila Meneses, una mujer laica indígena descendiente
quechua, teóloga y misionóloga boliviana, coordinadora de la red
Amerindia Cochabamba, red de católicos de las Américas, con espíritu
ecuménico y abierta al diálogo y a la cooperación interreligiosa que
tiene como prioridad, la opción preferencial por los pobres y excluidos.
“Nuestra sociedad – continua explicando Tania Avila - está marcada por
el egoísmo de buscar solo el bienestar actual y ve en la casa común un
objeto a usarse sin límites” recordando la necesidad de profundizar en
la Encíclica “Laudato Si” para superar esta mentalidad. “Hacer vida la
Laudato Si, el cuidado de la casa común, es una responsabilidad urgente
pues el daño causado es tan grande que si no tomamos acciones hoy mismo,
nuestras vidas corren grave riesgo”. “Necesitamos de una conversión
mental personal que pasa por la necesidad en primer lugar de 'Ecologizar
nuestros corazones'”, afirma.
Según la coordinadora de Amerindia Cochabamba uno de los puntos
fundamentales en los que habría que trabajar a nivel pastoral en lo que
se refiere a ecoteología integral es “aprender a escuchar y reconocer la
voz, los saberes, las espiritualidades de los pueblos indígenas con una
actitud de humildad y apertura hacia otros modos de conocimiento, que
son tan validos como el occidental”. Tania Avila, quien ha coordinado un
taller en el encuentro sobre “Ecología Integral: Discípulos -
Misioneros Custodios de la Creación”, celebrado en Quito el pasado mes
de noviembre, nos señala que es urgente "decir no al extractivismo y
reducir la huella de carbono,pero además a nivel personal podemos hacer
mucho, desde la administración del uso del agua, de la energía
eléctrica, reciclar, reutilizar. Es necesario evitar caer en un
consumismo que nos lleva a comprar y comprar, creándonos necesidades
innecesarias. Tenemos que hacer vida la Laudato Si” concluye.