Chiapas, MÉXICO (Agencia Fides, 28/09/2015) – “Me ha dolido, entristecido y preocupado lo
que está pasando como consecuencia de la inconformidad con los
resultados electorales, porque todos quieren un lugar en el poder en los
ayuntamientos”: con estas palabras Su Exc. Mons. Felipe Arizmendi
Esquivel, obispo de San Cristóbal de Las Casas, ha querido expresarse
sobre los trágicos acontecimientos sucedidos estos días.
Según la información de la Agencia Fides, un numeroso grupo de más de
1.500 indigentes de 3 localidades, había organizado una marcha hacia la
capital del estado de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez, este viernes 25 de
septiembre. Con la intención de protestar contra la estafa de las
últimas elecciones del 19 de julio y pedir la liberación de 3 indígenas
encarcelados injustamente. El sábado 26 fueron detenidos por la policía
ya que habían bloqueado la autovía San Cristóbal-Tuxtla Gutiérrez. Los
enfrentamientos que se ha producido han causado la muerte de un policía y
otros siete heridos.
Mons. Arizmendi Esquivel dijo ayer tras la Misa del domingo: “los
pueblos tienen derecho a luchar por lo que consideran justo, a
manifestarse y pedir, e incluso a exigir porque no se pueden acallar los
justos derechos. Pero nunca con la violencia, con bastones o piedras, y
menos aún con armas de fuego”. “Lo que no se puede aceptar – ha
subrayado Mons. Arizmendi Esquivel – es la violencia de ninguna
parte...no solo está la violencia represiva, ya que también está la
violencia ofensiva y obviamente la violencia provoca violencia y eso es
muy lamentable”.