''También
me complace saber -añade - que ese dicasterio desea establecer en esta
circunstancia una Fundación llamada Gravissimum Educationis encaminada a
proseguir "fines científicos y culturales para promover la educación
católica en el mundo" . La Iglesia reconoce que ''la importancia
decisiva de la educación en la vida del hombre y su influjo cada vez
mayor en el progreso social contemporáneo están profundamente vinculados
al cumplimiento del mandamiento recibido de su divino Fundador, a
saber, el anunciar a todos los hombres el misterio de la salvación e
instaurar todas las cosas en Cristo'', escribe el Papa citando la
declaración conciliar.
El
Santo Padre erige, pues, como persona pública canónica y como persona
jurídica civil la Fundación Gravissimum Educationis, con sede en la
Ciudad del Vaticano que se regirá por las leyes vigentes en la Iglesia y
por las civiles vigentes en la Ciudad del Vaticano, además de por su
estatuto.