CIUDAD DEL VATICANO, 27 de octubre de 2015
(VIS).- Esta mañana en la Oficina de Prensa de la Santa Sede ha tenido
lugar la presentación del 51° Congreso Eucarístico Internacional che se
celebrará en Cebu (Filipinas) dal 24 al 31 de enero de 2016 y cuyo tema
es ''Cristo in vosotros, esperanza de la gloria''. Han intervenido el Arzobispo de Cebú, Mons. José S. Palma, el arzobispo Piero Marini,
Presidente del Comité para los Congresos Eucaristícos Internacionales y
el Padre Vittore Boccardi, S.S.S., miembro de dicho comité.
El Arzobispo Palma recordó la importancia de la elección de Asia y de
Filipinas para la celebración del Congreso. ''En los últimos años -dijo-
Asia es el continente que se ha convertido en uno de los grandes
motores del crecimiento mundial desde el punto de vista económico y
social. Desde el punto de vista religioso, sin embargo, sigue siendo un
continente que tiene que ser evangelizado... donde la Iglesia Católica
es una pequeña minoría; a pesar de ser el continente donde Jesús nació,
vivió, murió y resucitó. El 51° Congreso Eucarístico, podría convertirse
en un espejo de la Iglesia asiática en el sentido de que reflejaría
cómo la Iglesia Católica lleva a cabo su tarea de evangelización. Al
igual que a los anteriores Congresos, asistirán representantes de las
diversas Iglesias y multitud de peregrinos de todo el mundo''.
El
Congreso contará con la presencia de de 20 cardenales, 50 obispos de
otros países y, al menos, 100 Obispos filipinos que se reúnen para la
asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal en enero de 2016 . Hasta
el 21 de octubre de 2015, se habían registrado 8.345 peregrinos
procedentes de 57 naciones. ''También contamos -dijo Mons. Palma- con
5.000 voluntarios y con 600 familias que se han brindado a acoger a los
peregrinos''.
El
evento estará dividido en dos partes. En primer lugar un "Simposio
Teológico" (del 20 al 22 enero) y posteriormente el Congreso propiamente
dicho (24-31 de enero) Los temas básicos para las reflexiones durante
el Simposio Teológico son: " La virtud cristiana de la esperanza";
"Eucaristía en el Evangelio de San Juan"; "Liturgia e Inculturación";
"La Historia del Novus Ordo"; "Evangelizar el mundo secular"; y "Un
Catecismo de la Eucaristía dominical". Durante el Congreso, los temas
serán "Cristo nuestra esperanza de gloria"; "La esperanza cristiana";
"La Eucaristía como la celebración del misterio pascual"; "La Eucaristía
como Misión"; "La misión como diálogo"; "La Eucaristía y el diálogo con
las culturas"; "La Eucaristía y el diálogo con los pobres"; "La
Eucaristía y el diálogo con otras religiones"; y "La Eucaristía y
María".
Por
su parte el Arzobispo Marini refiriéndose al tema del Congreso afirmó
que ''el anuncio evangélico y la fe en el Señor Jesús profesada por las
comunidades cristianas son importantes y necesarios para Asia, pero
deben presentarse según la modalidad del diálogo que ha marcado la
actividad de las Iglesias particulares del continente en las últimas
tres décadas. Efectivamente este programa de diálogo con las culturas,
las tradiciones religiosas y con las muchedumbres pobres, de forma
completamente natural y evidente, constituye la trama de reflexiones
pastorales contenidas en el texto base. El documento reitera que la
Eucaristía es la fuente y la cumbre de la misión de la Iglesia e
identifica el valor añadido que ofrece la celebración de la Eucaristía
para una misión comprometida en hacer crecer esas enzimas del diálogo,
de reconciliación, de paz y de futuro de las cuales Asia está sedienta.
''Por
lo tanto los Congresos Eucarísticos, van a Cebú -añadió – para recordar
que la misión es un intercambio de dones entre el que anuncia y el que
recibe el mensaje evangélico. Van a la ciudad que es la cuna del
cristianismo en Oriente para dar y recibir, para evangelizar y ser
evangelizado, para hablar pero también para escuchar. En ese contexto
humano que no está relacionado con el laberinto del racionalismo, la
celebración del misterio eucarístico se mezcla con la experiencia de la
pobreza, del dolor y el sufrimiento y continúa construyendo comunidades
deseosas de "comer el pan del reino de Dios".
En
conclusión el Padre Boccardi puntualizó que el evento de Cebú, junto
con las Jornadas Mundiales de la Juventud, de la Familia, etc ... se
convierte en ''un recurso extraordinario para dar testimonio, a través
de su celebración, de que la Eucaristía no es sólo fuente de vida de la
Iglesia, sino también el lugar de su proyección en el mundo. Cada
Iglesia particular que celebra la Eucaristía, en cualquier parte del
mundo, está llamada ahora a mostrar la madurez de la entrega a los
demás, de la escucha mutua,de la disponibilidad y de la colaboración
concreta para que la comunidad de los fieles se convierta en la casa de
Dios y de los hermanos en medio de las casas de las personas. Así se
podrá vivir ese ''diálogo de la vida", que es el punto de partida para
un testimonio gozoso del Evangelio''.