CIUDAD DE MÉXICO (Agencia Fides, 27/10/2015) – “La droga es droga aunque quiera
venderse como suave y medicinal bálsamo. Los malos copistas mexicanos
emulan los pasos de los vecinos para poner en la mesa de la 'sana
democracia' un debate desesperanzador, absurdo y contraproducente”: así
se lee en el editorial de “Desde la Fe”, semanario de la Archidiócesis
de México, recibido en la Agencia Fides.
Desde mañana 28 de octubre, la Corte Suprema de Justicia de México,
discutirá sobre la legalización de la mariguana, tema que la iglesia ha
propuesto que sea tratado junto a una investigación profunda sobre los
problemas generados por el consumo de mariguana. Ante las varias
campañas de estos días, la Archidiócesis de la capital ha propuesto un
texto muy claro sobre la posición de los católicos al respecto.
La Arquidiócesis invita a abrir los ojos sobre la situación: “Hay
expertos que consideran que el paso hacia la mariguana libre sería
trascendental en la consolidación del Estado democrático libre,
arguyendo que la planta es tan sana como un frasco de vitaminas...
tienen incluso la pretensión de afirman que podría paliar los efectos de
la violencia que genera la guerra contra las drogas y fincar un Estado
más libre y seguro… La pobreza, por ejemplo, es un detonador del consumo
y tráfico de drogas, y ahora este debate pretende desplazar los
principales problemas de justicia y bienestar para posicionar
mediáticamente las presuntas bondades de la adictiva planta”.
Por último el texto termina afirmando que: “La mariguana por placer es
placebo para apaciguar las dolencias de la destrucción social en la que
nos sumimos irremediablemente. Y la Iglesia enseña que este uso
irresponsable de la libertad conlleva efectos opuestos a los que se
buscan. Se admite fácilmente que lo que es ilegal podría ser normal y,
por tanto, moral. Cuando se permite la droga, no se apuesta sólo por un
producto, lo que está en juego es la vida y destino de las personas.