Pemba, ZAMBIA (Agencia Fides, 28/06/2016) – Son unos 645 millones de africanos los que viven
sin electricidad, algo que entre otras cosas, les impide la realización
de actividades económicas de cualquier tipo. La electricidad es el
principal desafío para el distrito de Pemba. Debido a la falta de
lluvias, no hay agua que permita funcionar las estructuras hidráulicas.
Las últimas lluvias estacionales, al ser escasas, han elevado el nivel
del lago muy poco, por lo que el volumen del agua ha alcanzado sólo el
17% de su capacidad, muy por debajo del año pasado con el 49%
registrado.
Para llenarlo harían falta un número adecuado de estaciones de lluvias,
junto con una producción de energía, requisitos que no se puede
garantizar.
Algunas estimaciones indican que 138 millones de hogares pobres gastan
10 mil millones de dólares al año en productos para la energía, como el
carbón, velas, kerosene y leña. A través del Programa Solar Scaling, que
tiene como objetivo diversificar las fuentes de energía, el país tiene
como objetivo cubrir la falta de este bien con una planta solar de 600
megawatt; por otra parte, ya están en construcción los locales para
generar 100 megawatt.