Bujumbura, BURUNDI (Agencia Fides, 16/09/2017) - “El diálogo inclusivo es la única forma de
reencontrar la paz”, dicen los obispos de Burundi en su mensaje
publicado al final de su asamblea plenaria y leído en todas las
parroquias del país durante las homilías del domingo 10 de septiembre.
“Insistimos una vez más en que el diálogo inclusivo debe ser
privilegiado, por un interés de la nación en detener el camino a todos
aquellos que quieren emprender la guerra”, dice el documento recibido en
Fides.
“Invitamos a todos los involucrados en la crisis a participar en el
diálogo bajo la mediación de un facilitador, y expresamos nuestra
preocupación porque parece que es difícil de lograr”.
El llamamiento de los Obispos llega en un momento en que no parece
encontrarse una salida a la crisis política burundiana comenzada en
abril de 2015 tras el anuncio del presidente Pierre Nkurunziza de volver
a presentarse para las elecciones con un tercer mandato, en violación
de la constitución y de los acuerdos de paz de Arusha, que sólo conceden
dos mandatos presidenciales. Después de la elección de Nkurunziza, en
julio de 2015, la violencia y la represión se acentuaron, empujando a
más de 425.000 burundianos a refugiarse en países vecinos. Ya en 2015, los obispos pidieron un “diálogo inclusivo”,
con los líderes de la oposición forzados al exilio para tratar de
alcanzar un acuerdo para superar la crisis.
Hasta ahora, el gobierno se ha limitado al diálogo con fuerzas que no
son totalmente representativas de toda la realidad política y social del
país.
Desde abril de 2015 hasta la actualidad, la crisis ha causado la muerte
de entre 500 y 2.000 personas (según fuentes de la ONU y algunas ONG),
así como cientos de personas desaparecidas y otras torturadas.
El 4 de septiembre, expertos nombrados por las Naciones Unidas que
investigan violaciones de los derechos humanos en Burundi han pedido a
la Corte Penal Internacional que inicie una investigación “lo antes
posible” sobre los abusos cometidos por oficiales y agentes de las
fuerzas de seguridad de Burundi acusados de ejecuciones extrajudiciales,
detenciones arbitrarias, tortura y violencia sexual.