Quintana Roo, MÉXICO (Agencia Fides, 26/07/2018) – El periodista Rubén Pat Cauich murió en
un tiroteo en la mañana del martes 24 de julio frente a un bar en Playa
del Carmen, en el estado mexicano de Quintana Roo, un famoso lugar
turístico. Esto fue confirmado por el gobierno municipal a través de una
declaración. Su asesinato tuvo lugar menos de un mes después de la
ejecución de otro periodista en la misma área, José Guadalupe Chan Dzib,
en la localidad Felipe Carrillo Puerto. Pat Cauich es el octavo
periodista asesinado en México este año. Las autoridades del estado de
Quintana Roo solicitaron una investigación seria sobre el crimen y
presentaron sus condolencias a la familia del periodista.
El fin de semana pasado, el Secretario de la Conferencia Episcopal
Mexicana (CEM), Monseñor Alfonso Gerardo Miranda Guardiola, Obispo
Auxiliar de Monterrey, Nuevo León, habló extensamente sobre este tipo de
violencia que se vive en el país. En una entrevista dada a la prensa
local, que fue una oportunidad para enumerar los problemas más graves
que la Iglesia desea presentar al nuevo Presidente de México, Monseñor
Miranda Guardiola dijo: "La Iglesia Católica ha lanzado un llamamiento a
la sociedad para "cerrar filas" y efectivamente reducir la violencia
que México ha estado enfrentando por varios años. Pide a los ciudadanos
que "no se duerman", porque su participación es necesaria para resolver
los problemas del país".
El Secretario General de la CEM también dijo que la Iglesia está lista
para colaborar en el proceso de reconciliación propuesto por el
presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, porque ante los niveles
de violencia e inseguridad, los mexicanos deben unirse para la
reconstrucción del tejido social y la construcción de la paz.
Mons. Miranda Guardiola hizo hincapié en que los obispos aún no se
habían reunido con el presidente electo, pero la Iglesia participará en
cualquier iniciativa destinada a reducir la violencia, y pondrá a
disposición de la población instrumentos como centros de asistencia a
las víctimas o seminarios de escucha, que en este momento están
funcionando en diócesis como Michoacán y Acapulco.