Minya, EGIPTO (Agencia Fides, 05/11/2018) - Pese a una nueva masacre de peregrinos 
cristianos por parte del terrorismo yihadista, los coptos no cerrarán 
las iglesias y no seguirán suspenderán las actividades litúrgicas y 
pastorales ordinarias en noviembre, como signo de duelo y denuncia de la
 violencia sufrida. Es porque la Iglesia debe celebrar a sus mártires 
como vencedores, no quiere negar la misión apostólica a la que ha sido 
llamada. Así lo informan los medios de comunicación egipcios citando las
 fuentes oficiales del Patriarcado Copto Ortodoxo.
Después de la masacre de once peregrinos coptos, asesinados por un 
comando terrorista yihadista cuando regresaban de una visita al 
monasterio de Anba Samuel, en la gobernación de Minya, militantes del 
mundo cristiano copto habían lanzado una campaña en los medios sociales 
para pedir la suspensión de las celebraciones litúrgicas en noviembre. 
Fuentes del Patriarcado copto ortodoxo, en respuesta a medios como 
CoptsToday, subrayaron que, según la fe cristiana, los mártires 
asesinados en odium fidei y acogidos en el Paraíso por el Señor deben 
ser celebrados con afecto y gratitud. Por eso la Iglesia continuará 
rezando y celebrando los misterios de la fe en la liturgia, recordando 
también a los nuevos mártires, precisamente por permanecer fieles a su 
misión. La secuencia tradicional de celebraciones litúrgicas y momentos 
de oración en las iglesias coptas de Egipto no se suspenderá ni 
modificará por ningún motivo.
Los coptos asesinados por la emboscada terrorista del viernes 2 de 
noviembre eran peregrinos de Sohag que regresaban de una peregrinación 
al monasterio de Anba Samuel el Confesor, a unos 220 kilómetros al 
sudeste de El Cairo. La masacre fue reivindicada por un grupo yihadista 
afiliado al Estado Islámico (Daesh). Los terroristas, disfrazados con 
uniformes militares, atacaron los tres autobuses de peregrinos de Anba 
Samuel. El gobierno ha asignado a cada una de las familias de las 
víctimas una indemnización inicial de 100.000 libras egipcias (alrededor
 de 5.000 euros). En el funeral de 7 de las víctimas, celebrado el 3 de 
noviembre en la iglesia de al-Amir Tadros en Minya, y en el que 
participaron 10 obispos coptos, Anba Macarius, obispo copto ortodoxo de 
Minya, anunció su intención de construir una iglesia donde se 
conservarán los restos de estos cristianos ya celebrados como mártires. 
El domingo 4 de noviembre, el Ministerio del Interior egipcio anunció 
que 19 presuntos miembros de grupos yihadistas fueron asesinados por las
 fuerzas policiales en una operación llevada a cabo en las zonas 
montañosas de la zona desértica, donde también se encuentra el 
monasterio de Anba Samuel; y añadió que entre los milicianos asesinados 
podrían estar también los autores de la masacre de peregrinos coptos del
 2 de noviembre.