Seúl, COREA DEL SUR (Agencia Fides, 19/09/2017) – Las peticiones contenidas en un llamamiento
especial en favor de la paz firmado por 2.000 personas de diferentes
nacionalidades, etnias y religiones reunidas en Seúl para la cumbre de
la Alianza Mundial de las Religiones por la Paz (World Alliance of
Religions Peace), que ha terminado el 18 de septiembre son: firmar y
aplicar el alto el fuego; negociar un tratado de paz y establecer una
era de reconciliación duradera en la península coreana.
En la cumbre han participado más de 50 líderes políticos y jefes de 30
países del mundo, más de 680 líderes religiosos (entre los cuales
cristianos de todas las confesiones) de 120 países.
La Alianza tiene como objetivo reforzar la red entre líderes y
comunidades religiosas del mundo para contribuir a la paz en el planeta.
El texto del llamamiento, enviado a la Agencia Fides, afirma que “los
líderes religiosos deben unir sus manos, refiriéndose al único Creador,
para terminar con todas las guerras y dejar la paz en el mundo como
herencia para las generaciones futuras”. A tal fin, se pide a los
representantes de las Naciones Unidas “que realicen todos los esfuerzos
posibles para emanar una ley internacional que garantice el cese de
todas las guerras y contribuya a la paz en el mundo”. Los signatarios,
dirigentes políticos y religiosos, se comprometen a cooperar y alentar a
las poblaciones de sus países “a lograr la paz en el mundo”. “La paz no
se logra a través del esfuerzo individual, sino gracias al compromiso
común y a la unidad de muchos que trabajan juntos”. En la ceremonia de
clausura de la cumbre, celebrada en el Parque Olímpico de Seúl el 18 de
septiembre, han estado presentes más de 200.000 personas de diferentes
confesiones religiosas, que a su vez se han comp
rometido
a convertirse en “mensajeros de la paz”.
Mientras tanto en la península coreana se vive en tensión. Mientras que
el régimen de Kim Jong-Un pretende “acelerar” su transformación hacia la
energía nuclear, los Estados Unidos han declarado que “también existe
la poción militar” y, en respuesta a los lanzamientos de misiles de
Pyongyang, han llevado a cabo una manifestación, simulando un bombardeo
en los cielos de la península coreana. China y Rusia también han
comenzado sus ejercitaciones navales cerca de Corea del Norte. En esta
situación, los líderes religiosos afirman que, “es cada vez más urgente
realizar un esfuerzo de paz”.