Estambul, TURQUÍA (Agencia Fides, 18/04/2018) - Durante el tiempo pascual “los frailes, junto
con el pueblo al que sirven, viven la alegría del Evangelio y
representan un puente de diálogo con personas de otras religiones,
especialmente musulmanes y hebreos”: así es como lo viven – según señala
una nota enviada a la Agencia Fides - los frailes franciscanos de la
“Fraternidad internacional para el diálogo” establecida por la Orden de
los Frailes Menores en Estambul, recordando la experiencia de San
Francisco, quién se reunió con el sultán Malik-al-Kamil en Damietta en
1219, y preparándose para conmemorar ese encuentro, 800 años después.
Según la información de la Agencia Fides, la fraternidad fue creada por
el entonces Ministro general, fray José Rodríguez Carballo (ahora
Arzobispo, Secretario de la Congregación para los Institutos de Vida
Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica) y abierta oficialmente
en 2004, como expresión del compromiso de la Orden de los Hermanos
Menores hacia el diálogo ecuménico e interreligioso. Su casa de
fundación es la parroquia de Santa Maria Draperis en Estambul, Turquía,
donde los frailes también sirven en la parroquia de Saint Louis, dentro
del territorio del Consulado de Francia.
“Dado que solo el 0,5% de la población local es católica, todo lo que
los frailes dicen y viven toca la esfera del diálogo: desde el trabajo
al intercambio espiritual y teológico. Debido a que el Islam es la
religión predominante en Turquía (98% de población), los musulmanes
sunitas, alauitas y sufíes son los principales partner del diálogo, pero
también hay excelentes relaciones con las comunidades cristianas
ortodoxas y protestantes”, señala en la nota enviada a la Agencia Fides
fray Eleuther Makuta, fraile de la República Democrática del Congo y
responsable de la comunidad.
“El pluralismo cultural - recuerda - ha marcado todos los aspectos de la
Semana Santa, desde el ministerio ecuménico en la prisión del Lunes
Santo hasta la Vigilia Pascual vivida conjuntamente por las comunidades
parroquiales italiana, inglesa, francesa y española. Hemos recibido
visitas de las autoridades civiles musulmanas. Dado que las parroquias
católicas están estrechamente vinculadas, muchas liturgias se celebran
en común, para aumentar el sentido de unidad que está al centro del
misterio pascual”.
Fray Eleuthere Makuta explica: “En Turquía, uno percibe inmediatamente
la catolicidad de la Iglesia: aquí los cristianos se ven llamados
diariamente a dar testimonio común del Evangelio, especialmente frente a
los grandes desafíos a los que se enfrentan, como la migración actual
de refugiados de Oriente Medio y África”.
En esta histórica encrucijada del cristianismo, en una tierra marcada
por la experiencia de San Pablo, los franciscanos viven la alegría de la
Pascua durante todo el año: “Las puertas siempre están abiertas,
especialmente en octubre, para un curso anual sobre el diálogo. Los
frailes acogen a cuantos desean ponerse al servicio de Cristo en
Turquía, por un período corto o largo”, concluye el fraile.