Juba, SUDÁN DEL SUR (Agencia Fides, 24/04/2018) -. “La Iglesia colabora para complementar los
esfuerzos del gobierno en la prestación de asistencia básica a las
personas necesitadas”, explicó a la Agencia Fides monseñor Eduardo
Hiiboro Barani Kussala, obispo de Tombura-Yambio (Sudán del Sur) , y
presidente de la Conferencia Episcopal que reúne a los obispos de Sudán y
Sudán del Sur. El 21 de abril, monseñor Barani presidió el la
colocación de la primera piedra de un centro de salud en su diócesis que
incluirá una clínica, un ala materno infantil, una sala de cirugía y un
banco de sangre. El nuevo centro se construirá en Nzara, un pequeño
pueblo ubicado a unos 24 kilómetros al noroeste de Yambio.
“La ceremonia de hoy marca el paso de las palabras a los hechos”, dijo
monseñor Kussala. “Desde que me convertí en obispo, hace casi diez años,
siempre he rezado y trabajado para procurar la construcción un centro
de salud eficiente para los más necesitados. A pesar del daño continuo
que provoca la guerra civil en nuestro país, hoy somos testigos de un
activo gesto de paz, que se desmarca fuertemente de la guerra”. Los
combates estallaron en Sudán del Sur en diciembre de 2013, cuando el
presidente Salva Kiir acusó a su ex vicepresidente, Riek Machar, de
intentar un golpe de estado, acusaciones que Machar rechazó.
“La colocación de la primera piedra marca el inicio de los trabajos de
construcción del nuevo hospital auxiliar”, indicó monseñor Kussala, que
agradeció su apoyo a los socios que económicamente han hecho viable el
proyecto. “El proyecto está promovido por la diócesis de Tombura-Yambio,
los misioneros Combonianos, la CMMB (Catholic Medical Mission Board),
la Fundación Edmond Rice, el Fondo de Ayuda para Sudán y muchos de
nuestros amigos más cercanos”, explicó monseñor Barani.
“Creo que estas noticias pueden ser útiles, ya que de Sudán del Sur solo
llegan noticias tristes”, afirmó monseñor Barani. Sobre por qué se ha
escogido Nzara, el obispo explicó que “la decisión se tomó sobre la base
de acuerdo a varios criterios como el tamaño del sitio y su ubicación, y
el interés de nuestra diócesis en esta zona donde gastamos casi el 50%
de nuestro presupuesto anual. El tamaño del terreno y del edificio que
se construirá se eligió de cara a posibles ampliaciones”.
“Desde el primer día del inicio del proyecto, lo confié a Santa Teresa
del Niño Jesús, a Santa Josefina Bakhita, a monseñor Titarani Gasi
Abangite, el difunto obispo de la diócesis y al Señor Resucitado, para
que finalmente pudiera construirse un centro de salud digno para nuestro
pueblo”, dijo monseñor Barani, quien concluyó asegurando que “Santa
Teresa reza por nosotros y por todos los que están involucrados en este
proyecto para ser bendecidos y lo puedan llevar a cabo” .