Roma, ITALIA (Agencia Fides, 22/05/2018) - “De la beatificación de Sor Leonella esperamos
una gran fuerza para la misión y por las vocaciones para que, viendo su
ejemplo, los jóvenes todo el mundo puedan preguntarse sobre la
posibilidad de entregar su vida por el Señor”. La hermana Renata Conti,
misionera de la Consolata, postuladora de la causa de beatificación de
la hermana Leonella Sgorbati, habla con la Agencia Fides en vísperas de
la ceremonia, que se celebrará el próximo sábado 26 de mayo en la
catedral de Piacenza, su lugar de nacimiento.
Sor Leonella Sgorbati, misionera italiana, fue asesinada el 17 de
septiembre en Mogadiscio (Somalia) a manos de unos sicarios mientras
acudía al hospital donde trabajaba. Con ella murió Mohamed Mahamud, el
guardia que había tratado de protegerla.
“Como instituto y como comunidad, - continúa la hermana Renata -,
vivimos este momento con mucha alegría y también con compromiso, ya que
la figura y el martirio de Sor Leonella son una fuerte llamada a nuestro
carisma: estamos llamadas a vivir la misión hasta dar la vida, esto
está escrito en nuestras constituciones y fue lo recomendado por nuestro
fundador, el beato Giuseppe Allamano. El martirio es, por lo tanto, una
llamada a todo nuestro instituto. Nuestra superiora general, la madre
Simona Brambilla, en su carta enfatiza que debemos mirar a la hermana
Leonella como un modelo carismático, un modelo que nos estimula a ser lo
que debemos ser”.
En la comunidad de las Misioneras de la Consolata, presentes en cuatro
continentes, este tiempo de preparación se ha vivido con la puesta en
marcha de varias iniciativas locales que culminarán el día de
beatificación, cuando en comunión con la celebración de Piacenza, se
celebre una misa solemne en todos los lugares del mundo donde están
presentes las Misioneras de la Consolata.
La hermana Leonella dio su vida como misionera en África, donde fue
enviada en 1970 y permaneció hasta su muerte, el 17 de septiembre de
2006, y donde su recuerdo sigue muy vivo. Los obispos de la Conferencia
Episcopal Latina de las Regiones Árabes (CELRA), al final de su visita
ad limina, en marzo, escribieron en su comunicado conclusivo: “Entre las
buenas noticias, hemos sabido que, entre los muchos mártires que
murieron por la fe en nuestras respectivas diócesis, Sor Leonella
Sgorbati, misionera consolata, mártir en Mogadiscio en 2006, será
beatificada el 26 de mayo de 2018 en Piacenza. Pensando en la vida de
esta hermana y de los miles de mártires de la fe, recordamos que su
sangre es una fuente de aliento y esperanza en nuestro compromiso con
los pobres. Saludamos con respeto y afecto a las congregaciones
religiosas, a los sacerdotes y a los fieles que trabajan en situaciones
dramáticas ...”.
A la ceremonia de beatificación, que será presidida por el cardenal
Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos,
acudirá una amplia delegación de Kenia, explica la hermana Renata: el
Arzobispo de Nairobi, el cardenal John Njue, Arzobispo de Nyeri y el
obispo de Meru, además de un grupo de representantes de la comunidad
local, sacerdotes diocesanos, religiosos, sus antiguos alumnas ...
“También habrá otros obispos, - continúa la hermana Renata -, como
monseñor Giorgio Bertin, obispo de Djibouti y administrador apostólico
de Mogadiscio, quien la conocía bien; naturalmente el obispo de
Piacenza, su ciudad natal; y el arzobispo de Milán, ya que la hermana
Leonella también vivía en Sesto San Giovanni. Para el 18 de junio en el
santuario de la Consolata en Kenia, ya está prevista una misa solemne de
acción de gracias por la beatificación en la que se espera que
participe mucha gente porque la hermana Leonella era muy querida”. Entre
los
momentos más significativos de la beatificación, la hermana Renata
recuerda que “nuestras novicias africanas, junto con los seminaristas de
los Misioneros de la Consolata africanos, llevarán a cabo un baile
típico de la liturgia africana, llevando la palma, signo de martirio”.
También junto con su reliquia, que será llevada por el superior general
después del decreto de beatificación, la superiora de la comunidad de
aquella época llevará los dos diarios escritos por Sor Leonella. “La
última oración es el 12 de septiembre de 2006 y está incompleta: “Espero
que el Señor me ayude ...”. Nos gustaría publicarlos porque dan
testimonio de una fuerte forma de entrega en plena unión con Jesús
Eucaristía”, asegura la hermana Renata.