CIUDAD DE MÉXICO
(Agencia Fides, 31/07/2014) – Urge considerar el concepto legal de
“reunificación familiar” para los niños inmigrantes que, de
Centro y Sudamérica, cruzan las fronteras de los Estados Unidos en
busca de una vida mejor y que tienen ya a sus padres residiendo en
los Estados Unidos: lo han pedido los obispos mexicanos durante la
visita del Gobernador de California (EE.UU.), Edmund G. Brown, que
está visitando durante cuatro días México.
Como informa una
nota enviada a la Agencia Fides por la Conferencia Episcopal Mexicana
(CEM), el gobernador Brown ha pasado el segundo día de su visita,
con los obispos de México, Estados Unidos, El Salvador y
representantes diplomáticos de otros países centroamericanos para
abordar el problema de los niños detenidos en la frontera. El
fenómeno es considerado ya como emergencia humanitaria en la región. “Una de las razones principales – por
las que sólo de octubre a la fecha han emigrado más de 57 mil niños
indocumentados a Estados Unidos, la mayoría centroamericanos – s
la falsa información sobre una eminente reforma migratoria”,
explica la nota de los obispos, afirmando que esto ha sido
aprovechado por traficantes de personas para llevarse y abandonar en
la frontera a cientos de chicos. El obispo mexicano Mons. Guillermo
Rodrigo Teodoro Ortiz Mondragón, de la diócesis de Cuautitlán y
responsable de la comisión para la movilidad humana de la Confere
ncia Episcopal Mexicana, ha dado a Fides más información al
respecto: el gobernador de California ha lamentado el “estancamiento”
en el que se encuentra en el Congreso americano la iniciativa de
reforma migratoria, que abriría la vía a la ciudadanía a 11
millones de inmigrantes indocumentados que viven, estudian y trabajan
en ese país.
Los obispos, junto
al gobernador, han acordado el iniciar y sostener campañas de
información veraz sobre las leyes migratorias en Estados Unidos, y
al mismo tiempo considerar la legalización de la “reunificación
de las familias de los menores migrantes” en la frontera que ya
tiene a sus padres en los Estados Unidos.
California comparte
con México una frontera de 225 kilómetros, por a donde cruzan
también legalmente miles de personas y mercancías diariamente,
especialmente por el paso entre Tijuana (México) y San Diego
(Estados Unidos). En esta zona se han descubierto túneles
clandestinos para el paso de indocumentados y el tráfico de drogas.