Kinshasa, REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO (Agencia Fides, 25/07/2017) - “Estamos profundamente preocupados por el
secuestro de nuestros hermanos, y exigimos su liberación incondicional”.
Con esta afirmación, los sacerdotes de la diócesis de Butembo-Beni han
recurrido a los secuestradores de dos sacerdotes, don Charles Kipasa y
don Jean Pierre Akilimali, secuestrados el domingo 16 de julio por unos
hombres armados vestidos de militares en la parroquia Maria Reina de los
Ángeles de Bunyuka, en la periferia de Butembo.
El apelo a los secuestradores está contenido en una carta dada a
conocer al final del retiro anual del clero de la diócesis con su Obispo
Su Exc. Mons. Melquisédec Sikuli Paluku.
Los sacerdotes denuncian la inseguridad de la zona “por los ataques
nocturnos, los asaltos con cuchillos y armas de fuego, los homicidios,
robos y violaciones, el resurgimiento de grupos armados, sin contar el
número de personas asesinadas, lo que causa el desplazamiento de las
poblaciones. Estos actos degradan la vida humana y desacralizan tanto a
las personas, como los lugares y bienes consagrados. Esto es un
sacrilegio y una profanación”.
En la carta se recuerda el precio de sangre pagado por la iglesia por
las acciones homicidas de los grupos armados que actúan en la diócesis.
En particular los homicidios de don Romain Kahindo Kyavuyirwe (asesinado
en octubre de 2002) y de don Christian Mbusa Bakulene, el secuestro de los padres asuncionistas, Jean-Pierre
Ndulani, Anselme Wasikundi y Edmond Bamutute, secuestrados en su
parroquia de Notre-Dame des Pauvres de Mbau, a 22 km de Beni y el asesinato de otro asuncionista, el p. Vincent
Machozi que durante años denunció la explotación ilegal del Coltan.
Ante este nuevo acto de violencia contra los sacerdotes, el clero de
Butembo-Beni ser dirige a los secuestradores afirmando “ya basta” y
después de haberles puesto “frente a sus responsabilidades” apelan “a su
conciencia” para que nuestros sacerdotes don Charles Kipasa y don
Jean-Pierre Akilimali sean liberados vivos para que puedan continuar su
misión pastoral”.