Dakar, SENEGAL (Agencia Fides, 26/07/2017) - Se estima que alrededor del 10% de los
medicamentos en circulación en el mundo son falsos, una cifra que es
equivalente a 85 mil millones de euros, según el Instituto de
Investigación contra la falsificación de medicamentos de París. En el
África subsahariana, se trata del 30%, según los investigadores. La
India es el primer país en el que las medicinas ilícitas, de
contrabando, empaquetadas mal o caducadas, según la Organización Mundial
de Aduanas. Ante este fenómeno, que los estados no consiguen detener,
algunas start-up han presentado soluciones prácticas. Una de estas, la
senegalesa JokkoSanté, ha puesto en marcha el concepto de “farmacia
virtual”, todavía en fase experimental. La start-up también proporciona
un sistema de “adopción” a través del cual las grandes empresas
proporcionan medicamentos gratuitos a los que no pueden pagarlos, en un
país donde más del 50% de la población no tiene seguridad social.
Otra start-up, Sproxil, fundada en el 2009, permite a los usuarios
verificar la autenticidad de un producto medicinal, gracias a la
telefonía móvil, a través de un código de identificación. En seis años,
Sproxil ha registrado más de 50 millones de intercambios de SMS en
África y la India.
En una cumbre celebrada en Liberia el pasado mes de abril, la Comunidad
Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) ha anunciado el
lanzamiento de un estudio sobre el tráfico de medicamentos caducados o
falsificados, así como una campaña de sensibilización. El problema del
acceso a los medicamentos afectan a los sectores más vulnerables de la
población que no tiene recursos para adquirirlos y termina
adquiriendolos con un origen dudoso. En 2013, a causa de dos
medicamentos contra la malaria, uno falso y otro ineficaz, murieron más
de 122.000 niños africanos.