Almaty, KAZAJSTÁN (Agencia Fides, 19/07/2019) – “Agradecemos a la Cáritas de Shymkent por
ofrecer su ayuda a los ciudadanos de Arys. En junio pasado se produjo
una explosión en el almacén militar de la ciudad lo que provocó la
evacuación de la zona. Miles de personas fueron trasladadas a la cercana
ciudad de Shymkent. Allí los voluntarios de Cáritas dieron ropa y
primeros auxilios básicos a los desplazados. Esperamos que esto pueda
ser un poco de ayuda para reanudar la vida normal después de lo
ocurrido”. Así lo recoge una nota enviada a la Agencia Fides por Cáritas
Almaty que detalla las consecuencias de la explosión en la base militar
en Arys, una ciudad de 44 000 habitantes en el sur del país. Después de
la explosión, la población de toda la ciudad tuvo que abandonar la zona
temporalmente.
Según el portavoz oficial del Comité de Emergencia del Ministerio del
Interior, Nursultan Nurakhmetov, tras el accidente, “70 personas
buscaron asistencia médica, 45 de ellas fueron ingresadas en el hospital
y tres han fallecido”.
El dramático evento hizo que la nación se uniera alrededor de la ciudad
de Arys. 145 expertos y técnicos en bombas fueron enviados a la zona
para asegurar el área y extinguir los más de 50 incendios que también
dañaron casas privadas. En la región de Turkestán se creó un fondo
especial para ayudar a las víctimas y se enviaron por aire 10 toneladas
de ayuda humanitaria desde Karaganda. Además, la región de Aqmola ha
puesto a disposición los cinco centros de salud más grandes de la zona y
un centro turístico para alojar a los niños de Arys.
Aproximadamente un mes después del desastre, ha comenzado el regreso de
las personas desplazadas gracias a la ayuda de 640 voluntarios. Mientras
tanto, el personal del Primer Ministro Kassym Jomart Tokayev anunció
que el Fiscal General de la República, Gizat Nurdauletov, está
preparando una acusación contra los responsables de la explosión.