Por cada mujer encarcelada, hay tres niños que se quedan solos la calle

La Paz, BOLIVIA (Agencia Fides, 08/07/2017) – En Bolivia hay unas 1.181 reclusas. Un estudio del 2016 de la Fundación Construir ha revelado las dramáticas consecuencias que se producen cuando una mujer es encarcelada. Por ejemplo, que por cada mujer que entra en prisión, tres niños terminan en la calle. Según el estudio, el 75% de las mujeres ha confesado haber abandonado a un hijo. Otros niños pasan a cargo de los parientes más cercanos, a cargo de sus hermanos mayores o solos. El 25% de las mujeres vive en la prisión con sus hijos en espacios pequeños y condiciones pésimas y, a menudo, son excluidas de los programas laborales o educativos. De las 61 cárceles que hay en el país, en ocho solo hay mujeres y solo cuatro de estas penitenciarías se construyeron exclusivamente para ellas. Las otras adaptaron sus estructuras. La mayor parte de las reclusas han sufrido violencia en el hogar y son madres que cometieron delitos por alimentar a sus hijos, entre los más extendidos, el tráfi co de droga y el hurto. El estudio señala que el 80% de las mujeres detenidas lo fueron por delitos menores mientras que el 20% por homicidio o robo con violencia.