Pekín, CHINA (Agencia Fides, 06/07/2017) – Es el momento de dar un nuevo impulso a la
movilización misionera, nutrida por la Palabra de Dios y por la oración,
guiados por el Espíritu Santo, con un mayor compromiso de los laicos.
Estas son algunas de las reflexiones de los participantes en el primer
taller sobre Evangelización, organizado por la Unión de las Superiores
Mayores de los Institutos Religiosos Femeninos de China Continental. Del
21 al 25 de junio en Pekín, se han reunido 51 religiosas, -en primera
línea de la evangelización-, 19 congregaciones religiosas, 17 sacerdotes
y unos 20 laicos activos en la vida pastoral y la misión.
Según la información recogida por la Agencia Fides, gracias al
testimonio directo de las religiosas, sacerdotes y laicos que trabajan
en el terreno, los participantes han reflexionado durante los trabajos
sobre varios aspectos de la evangelización: El contexto urbano, el mundo
rural, los medios de comunicación, los jóvenes, el apostolado, el
anuncio… El director de Faith, John Battista Zhang, que recopila
anualmente las estadísticas de los bautizados en China, hizo reflexionar
a todos con una pregunta: “Con 1.300 millones de personas. Tener entre
30 y 50.000 bautizados al año, ¿no son demasiado pocos?”.
A partir de esta pregunta, los participantes analizaron los problemas,
las dificultades y los obstáculos que ralentizan la evangelización,
discutieron sobre el papel de la parroquia, de la catequesis, de los
catequistas y de los grupos de evangelización de las comunidades
católicas de base. Todos coincidieron en el hecho de que las religiosas
tienen un don natural para llevar el amor de Cristo a las personas, con
su extraordinaria dedicación y capacidad para comunicar el espíritu de
amor del Evangelios. Se subrayó además cómo hoy los laicos son muy
activos e indispensables para la evangelización del mundo contemporáneo.
Durante la puesta en común, sor Nan Ying Hui, de la Congregación de la
Presentación de Nuestra Señora de Shanghái, declaró: “Me parece que se
ha producido un cambio en la evangelización en las diferentes diócesis
que me ha abierto los ojos y me ha sensibilizado en la necesidad de la
urgencia misionera”.
Las hermanas de Shan Xi y del interior de Mongolia
hablaron de otra prioridad: “Es necesario que nosotras mismas mejoremos
como religiosas, en la conciencia y la profundización de la fe. Después
de haber escuchado estos testimonios, me siento como en crisis. Los
laicos de hoy son formidables, tanto desde el punto de vista teórico
como desde el práctico de la evangelización”.
“Gratitud y movilización” son las dos ideas que los participantes se
llevaron consigo: Una inmensa gratitud a Dios por todos los éxitos
obtenidos hasta ahora y movilización para relanzar con un entusiasmo
renovado la tarea evangelizadora.