TÚNEZ (Agencia Fides, 25/11/2015) - “Túnez se ha despertado con mucha tristeza y
decepción”, dice a la Agencia Fides el padre Jawad Alamat, Director
Nacional de las Obras Misionales Pontificias (OMP) de Túnez, después del
atentado suicida de ayer, 24 de noviembre en Túnez contra un autobús
que transportaba a agentes de la Seguridad Presidencial. El padre Jawad
dice que con este ataque, “se ha querido enviar un de nuevo un mensaje
desestabilizador. Después de golpear el turismo en Souse, infligiendo un duro golpe a la economía, y después de atacar
el Museo del Bardo, lo que significa no sólo
golpear el turismo sino también una zona de gran importancia política
por la cercanía del Parlamento, ahora han golpeado a las fuerzas de
seguridad presidencial”.
El Director de las OMP de Túnez subraya: “Estamos frente a personas
dispuestas a morir, para matar. No podemos hablar de choque entre
religiones. Las víctimas de Túnez eran todas musulmanas. Todos nos
enfrentamos a un terrorismo inhumano. Lo que sucede en París ocurre
también en Túnez, lo que pasa en Beirut sucede también en Malí. Somos
parte de un mundo globalizado pero no por el bien, sino para el mal”.
“Espero – dice para terminar - que después de este nuevo atentado, la
política haga un cambio y reaccione. Los tunecinos observan
decepcionados y consternados los juegos entre los partidos, mientras que
el país vive grandes dificultades. Se tiene la sensación de estar
perdiendo un tiempo precioso para revivir la economía. Espero que este
atentado empuje a los políticos a dejar de 'jugar', es hora de ser
adultos y de pensar en el bien del país, que está amenazado por un
enemigo muy determinado. Es una llamada a la unidad nacional, a pesar de
las diferencias políticas, para proporcionar seguridad a la población
local y a todos los que viven en este querido país”.