Nairobi, KENIA (Agencia Fides, 14/12/2016) - “Comprometeros en salvar vidas y no abuséis de
vuestro rol para obtener dinero”. Este es el llamamiento lanzado por
los Obispos de Kenia a los responsables de garantizar la seguridad en
las carreteras después del trágico incidente del sábado, 10 de diciembre
que tuvo lugar en la carretera que une Nairobi a Naivasha.
Un camión cisterna que transportaba gas inflamable se salió de control
después de pasar a toda velocidad en un bolardo (reductores de velocidad
colocados especialmente para obligar a los vehículos a reducir la
velocidad), invistiendo a una fila de vehículos. En la explosión y el
incendio del tanque murieron cuarenta personas.
“La Conferencia Episcopal de Kenia y toda la Iglesia católica expresa su
más sentido pésame y se une al dolor de las familias de los
fallecidos”, se lee en un comunicado enviado a la Agencia Fides.
“Hacemos un llamamiento a los diferentes aparatos gubernamentales
responsables de los transportes por carretera y a los organismos de
seguridad para que pongan señales de tráfico correctas, y nos
preguntamos si existe un replanteamiento de la colocación de los
reductores de velocidad en las carreteras del país. Estas protuberancias
siempre se retiran después de un accidente”, subrayan los obispos.
“Pedimos a los conductores que tengan cuidado sobre todo en el tiempo de
Navidad y hacemos un llamamiento a los organismos responsables de la
seguridad vial para renovar el compromiso de salvaguardar las vidas
humanas y no ver en ello una oportunidad de obtener dinero fácil a
través de la corrupción y de la extorsión”.
Según la Autoridad Nacional de Transportes, este año han muerto hasta la
fecha 1.574 personas en accidentes de tráfico, 86 más que en el mismo
período del año pasado.