Bogotá, COLOMBIA (Agencia Fides, 10/03/2017) – “Ayer celebramos el día de la mujer y aquí
sentimos su ausencia, hay una madre desconsolada, unos hermanos tristes,
una congregación preocupada (…) hacemos un llamamiento a todas las
autoridades para que nos ayuden a dar con su paradero”: son la palabras
de la hermana Noemí Quiceno, madre superiora de la Comunidad
Franciscana de María Inmaculada, en Bogotá, a un mes de distancia del
secuestro de la hermana Gloria Cecilia Narváez Argoti, misionera en Mali.
“Ella solo se dedica a hacer el bien, son muchos los huérfanos, enfermos
y desamparados los que la necesitan, pedimos misericordia a Dios para
los que la secuestraron, porque no saben el mal que están haciendo, toda
la comunidad franciscana clama por su pronta libertad”, ha dicho la
superiora a una radio colombiana.
Según la información recibida en la Agencia Fides, toda la comunidad de
las religiosas de la congregación estaba presente en la Jornada de
Oración por la hermana Gloria Cecilia, que se ha celebrado en Bogotá el 8
de marzo, y en la que estaban invitados muchos fieles y las
autoridades.
La hermana Gloria fue secuestrada la tarde del 7 de febrero en la aldea
de Karangasso, cerca de Koutiala, que está a unos 400 kilómetros al este
de Bamako, capital de Mali. Los secuestradores afirmaron ser
yihadistas, peor hasta la fecha no hay ninguna confirmación sobre la
motivación del secuestro.