Cúcuta, COLOMBIA (Agencia Fides) – El consumo de droga, que se puede verificar por
el alto porcentaje de tráfico de drogas que gira alrededor de las
nuevas generaciones, es uno de los muchos problemas que preocupan a la
Iglesia Católica de Cúcuta:
“En la zona de frontera se vive un gran via crucis. En Cúcuta hay mucha
violencia, una violencia que se está difundiendo, con asesinatos,
prostitución todo eso no está bien”
ha dicho en una entrevista con Radio Caracol, enviada a la Agencia
Fides, el obispo de Cucuta, Su Exc. Mons. Victor Manuel Ochoa. La cosa
más triste de todas, continua el obispo, es que los jóvenes se están
convirtiendo en los protagonistas de estas acciones criminales que se
producen todos los días en la ciudad.
Para poder combatir esta situación, ha dicho el obispo, “es necesario
intervenir no solo en materia de seguridad, sino con acciones sociales
que mejoren y dignifiquen la calidad de vida de cientos de familias
cucuteñas que viven en situaciones de exclusión y de pobreza muy graves:
más del 33% de la población vive con menos de un dólar al día, hay
también un gran problema de desempleo y al final estamos dejando crecer
la maleza, está aumentando lo que no es bueno, la drogadicción, el
tráfico de drogas”. Por desgracia, ha dicho para concluir Mons. Ochoa,
la descomposición del núcleo familiar es uno de los factores que causan
esta situación social.